Las enormes expectativas de intercambio de mercancía de importación y exportación entre China y España lo traía el primer tren Yixinou en su primer viaje en diciembre teniendo como objetivo salir a mediados de enero para llegar a tiempo al año nuevo chino. Lo que no se plantearon fue con la reticencia que se tomarían los exportadores españoles a la hora de embarcar sus mercancías por una nueva vía.

El alto coste de exportación de contenedores por tren, sumado a las bajas temperaturas del invierno ruso hace que todavía los contenedores se encuentren vacíos en la estación. Se comentaba que ahora no se tendría que depender del estado del mar, teniendo en cuenta que este nuevo servicio sería mucho más rápido e igual de eficaz y efectivo.

Tanto los exportadores de aceite de oliva, vino y resto de productos, como los importadores de mercancía china tendrán que esperar un precio a la baja para exportar por esta nueva ruta. Mientras tanto las exportaciones por barco sigue siendo la mejor opción en cuanto a exportación e importación de China.

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